Brasilia, 1 may (Prensa Latina) La persona más anciana del mundo, la monja brasileña Inah Canabarro Lucas, murió a los 116 años, según confirmó hoy la Congregación de las Hermanas Teresianas, con quien vivía en Porto Alegre, capital del estado Rio Grande do Sul.
Canabarro Lucas fue reconocida como la decana de la humanidad tras la muerte, en enero, de la japonesa Tomiko Itooka, también fallecida a los 116 años, según el Grupo de Investigación Gerontológica de Estados Unidos y LongeviQuest, una organización con más de 110 años de investigación en el área de la longevidad.
El club local de fútbol Internacional(Inter), del cual la brasileña era fanática, lamentó su perdida.
«Con gran tristeza, Internacional recibe la noticia del fallecimiento de la Madre Inah Canabarro. La hinchada colorada, quien nos dejó este miércoles, era la mujer viva más longeva del mundo y dedicó sus 116 años de vida a la bondad, la fe y el amor por el Club del Pueblo», refiere la nota de la sociedad deportiva.
Historiadores aseguran que Canabarro Lucas nació en Sao Francisco de Assis, oficialmente, el 8 de junio de 1908. Sin embargo, ella garantizó que la fecha correcta era anterior: 27 de mayo.
Bisnieta del general David Canabarro, héroe de la Guerra de los Farrapos (conflicto que ocurrió en Rio Grande do Sul entre 1835 y 1845 y el más largo del período imperial brasileño), se convirtió en monja después de estudiar en el internado Santa Teresa de Jesús, en Santana do Livramento.
Tras graduarse como maestra, vivió en Uruguay y Río de Janeiro, hasta regresar a Rio Grande do Sul a principios de la década de 1940.