Un grupo de científicos ha identificado la zona del cerebro que registra las experiencias amenazadoras y la que permite recordar a las personas asociadas a esos episodios sociales aversivos del día a día (en la casa, el hogar, la calle, etc.), informó este martes el Instituto Zuckerman de Comportamiento Mental Cerebral de la Universidad de Columbia (Nueva York, EE.UU.).
Para determinar dónde se originan los recuerdos asociados al miedo en el cerebro, la doctora Pegah Kassraian y su equipo usaron ratones, a los cuales sometieron a una serie de dinámicas entre ellos. Mediante el uso de un escenario y pequeñas descargas eléctricas, los roedores aprendieron a evitar los lugares peligrosos y a recordar al menos por 24 horas a los animales relacionados con esas experiencias. Los hallazgos fueron publicados este martes en la revista Nature Neuroscience.
En un análisis microscópico del hipocampo de los ejemplares, zona del cerebro fundamental en la memoria en humanos y ratones, los investigadores descubrieron que las regiones CA1 y CA2 codifican respectivamente los lugares y los individuos vinculados con una situación amenazante. A esta conclusión llegaron tras alterar genéticamente a los roedores para que suprimieran selectivamente una de ellas, lo que tuvo efectos muy diferentes. «Los recuerdos de miedo son importantes para la supervivencia y ayudan a mantenernos a salvo», subraya Kassraian.
«Cuando los científicos silenciaron la CA1, los ratones ya no podían recordar dónde habían recibido la descarga, pero sí podían recordar qué [ratón] extraño estaba asociado con la amenaza. Cuando silenciaron la CA2, los ratones recordaron dónde habían recibido la descarga, pero empezaron a tener miedo indiscriminadamente», explican desde el Instituto Zuckerman.