Defensa de propietarios del Jet Set desmiente mala fe y niega intimidación a testigos

Tras varias horas de interrogatorio en la Procuraduría General de la República, los hermanos Antonio y Maribel Espaillat fueron detenidos y fueron trasladados a la “carcelita” del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva. El abogado de ambos, Miguel Valerio manifestó su postura de la defensa y desmintió acusaciones de intento de intimidación a testigos.

Valerio confirmó que el Ministerio Público decidió ejecutar los arrestos como parte del proceso investigativo, señalando que “ese arresto va a llevar una medida de coerción que mañana se someterá”. Añadió que el Ministerio Público cuenta con 48 horas para formalizar la acusación, y reiteró la plena disposición de sus clientes para colaborar con las autoridades.

En cuanto a la naturaleza del caso, Valerio admitió que la investigación gira en torno a un «posible homicidio involuntario» tras el desplome ocurrido en la discoteca Jet Set de la familia Espaillat. Aclaró que no existió intención ni mala fe en lo sucedido, subrayando que “nadie quería que esto pasara” y que “la hermana del señor Espaillat estaba en el lugar de los hechos”, lo cual, según él, refuerza la idea de que se trató de un accidente.

Sobre las versiones encontradas entre empleados y los acusados, el abogado reconoció que “el empleado dio su versión, nosotros tenemos la nuestra”, y aseguró que serán las autoridades quienes determinen los hechos. También hizo énfasis en la confidencialidad de la investigación.

Respecto a las denuncias de la Procuraduría sobre supuestos intentos de intimidación a testigos, Valerio negó de forma categórica dichas acusaciones, argumentando que “¿cuál necesidad tendría la familia Espaillat de amenazar a los testigos cuando ellos no querían que eso pasara?”.

“Se ha desnaturalizado todo. Estamos tratando un caso de imprudencia como si fuera crimen organizado”, lamentó el abogado, quien aprovechó para defender el historial de integridad de la familia Espaillat, destacando sus más de cinco décadas de trayectoria empresarial.

Valerio pidió respeto al debido proceso y calma mientras avanzan las investigaciones, asegurando que la familia Espaillat está comprometida con la verdad y con que se haga justicia de forma transparente.