Ilke Wyludda, la campeona olímpica de lanzamiento de disco en Atlanta 96, murió el pasado domingo con solo 55 años en Halle, según se conoció este martes.
La atleta de Leipzig logró el máximo triunfo deportivo con la Alemania reunificada después de estrenarse en el atletismo con el país del este, la RDA, con el que ganó su primer título europeo en Split 1990, y ya con sus nuevos colores repitió su triunfo cuatro años después en Helsinki 94.
La lanzadora fue un joven talento que consiguió proclamarse dos veces campeona mundial junior (sub-20) en 1986 y 1988, y un año después, con solo 20 años, lanzó 74,56 metros, la tercera mejor marca de la historia en una lista histórica cuyas ocho primeras marcas son de países del este y de los años 80, lo que despierta amplias dudas por los métodos de dopaje sistemático usados tanto en la RDA como en la URSS, aunque Wyludda, como tantas otras, nunca dio positivo.
En su primera épica, entre 1989 y 1991, Wyludda mantuvo una racha victoriosa de 41 competiciones que se vio cortada precisamente en el Mundial de Tokio, donde no pasó de 70 metros y le superó la búlgara Tsvetanka Jristova. Un año después, solo pudo terminar 9ª en los Juegos Olímpicos de Barcelona y hasta Gotemburgo 1995, cuando ganó otra plata mundial tras la bielorrusa Ellina Zvereva, con la que compartiría podio en los Juegos de Atlanta, aunque ya con ella en los más alto tras un mejor lanzamiento de 69,66m.
Desde 1992, cuando tenía 23 años y ganó en el Mitin de Sevilla, Wyludda no volvió a superar nunca más los 23 metros, aunque su carrera se prolongó hasta Sídney 2000, donde terminó 7ª.
Más de una década después, sufrió una infección bacteriana que obligó a que le amputaran su pierna derecha, por lo que se pasó al deporte adaptado y en Londres 2012 se convirtió en la primera atleta alemana en competir en unos Juegos Olímpicos y en unos Juegos Paralímpicos. Aunque le faltó la medalla paralímpica, sí subió al podio en Europeos y Mundiales de paraatletismo en lanzamiento de disco y peso.
