La filtración de datos de Tesla, ocurrida en mayo, afectó a más de 75.000 personas y fue el resultado de «infracciones internas», según un aviso publicado por la Fiscalía General de Maine.
Un total de 75.735 personas se han visto afectadas, entre ellas nueve residentes de Maine que son o han sido empleados del fabricante de automóviles con sede en Austin, Texas.
Dos exempleados de Tesla se apropiaron de la información y la compartieron con el medio de comunicación alemán Handelsblatt. El equipo del medio pasó meses examinando los «archivos de Tesla»,que contenían 100 gigabytes de datos confidenciales, y los publicó en mayo del 2023.
La automotriz presentó inmediatamente demandas contra los dos trabajadores, sin especificar en qué jurisdicción, y se incautó de sus equipos, que contenían información de la empresa.