Además de al presidente del Gobierno, los paquetes fueron enviados a la Embajada de Ucrania, a una empresa armamentística, al Ministerio de Defensa, a la base aérea militar de Torrejón de Ardoz y a la Embajada de EE.UU.
En las últimas 24 horas se han detectado en España varios sobres o paquetes que contenían explosivos dirigidos tanto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como a diferentes instituciones y organismos en el país.
El primero que se dio a conocer fue un sobre enviado a la Embajada de Ucrania en Madrid, después se informó de uno dirigido a una empresa armamentística en Zaragoza y otro a la base aérea militar de Torrejón de Ardoz, en las cercanías de la capital española. Este jueves se han detectado otros tres envíos con similares características, el último en la Embajada de EE.UU.
El secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez Ruiz, ha comparecido la mañana de este jueves ante los medios para dar información sobre estos sucesos. Esto es lo que se sabe hasta el momento de cada uno de los paquetes.
El primer incidente tuvo lugar este miércoles. Un paquete dirigido al embajador ucraniano, Sergei Pohoreltsev, llegó a las instalaciones diplomáticas a través del cartero habitual, por correo ordinario y no pasó el escáner de seguridad.
El envío contenía una caja en su interior y levantó las sospechas de la secretaria porque, además, no tenía remitente. Fue entregado al jefe de seguridad, quien optó por realizar la apertura en el patio, lejos de otras personas.
Cuando se disponía a abrir la caja, el funcionario oyó un clic, por lo que lanzó inmediatamente el objeto, que explotó, causándole heridas menores en la mano. El hombre pudo dirigirse por su propio pie al hospital Nuestra Señora de América.
Por su parte, el embajador ucraniano ha culpado a Rusia del ataque y el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, ha ordenado reforzar la seguridad de todas las representaciones diplomáticas en el exterior, si bien no ha hecho ninguna hipótesis sobre la autoría del envío.
Poco después, durante la tarde del miércoles, se conoció que un envío similar había llegado a las instalaciones de la empresa armamentística Instalaza, en la ciudad de Zaragoza. En el remite figuraba el mismo correo electrónico que en el paquete que llegó a la Embajada de Ucrania.
En este caso el explosivo fue detonado por los Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (TEDAX) de manera controlada y no se produjo ningún herido.
Los servicios de seguridad del Ministerio de Defensa han detectado este jueves el que sería el cuarto paquete, de similares características. Se ha localizado en la sede central del Ministerio, en el Paseo de la Castellana 109, una de las principales arterias de la capital española.
Por el momento no se conocen más detalles, más allá de que iba dirigido a la titular del departamento, Margarita Robles. Los TEDAX se han dirigido hasta ese edificio para controlar la situación, mientras que los trabajadores fueron desalojados, aunque ya han podido volver a sus puestos de trabajo.
El último que se ha conocido es un paquete enviado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Si bien ha trascendido este viernes, fue recibido el pasado jueves 24 de noviembre, aunque no se puso en conocimiento de la Audiencia Nacional hasta este viernes, tras constatar que podría haber coincidencias con el incidente en la Embajada de Ucrania.
En este caso, el envío fue identificado durante las tareas de cribado y filtrado de la correspondencia, que detectó un paquete postal sospechoso. Posteriormente se procedió a la deflagración controlada por parte de los servicios de seguridad de Presidencia del Gobierno.
A la espera de los análisis definitivos, se cree que el sobre contenía un material similar al utilizado en artefactos pirotécnicos.
Desde ese 24 de noviembre, la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior dio orden de reforzar la seguridad de administraciones y edificios públicos por parte de la Policía Nacional y la Guardia Civil.
El último paquete de estas características encontrado ha sido detectado alrededor de las 12.30 de este jueves en las instalaciones de la Embajada de EE.UU., entre la calle Serrano y el Paseo de la Castellana de la capital española.
La céntrica zona ha sido acordonada por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y se ha activado el protocolo antiterrorista. El tráfico rodado y peatonal ha sido cortado y los trabajadores de la sede diplomática de de edificios aledaños han sido desalojados.
Hasta ese entorno se han trasladado además coches de bomberos, un helicóptero para sobrevolar la zona y los Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (TEDAX), que han detonado el artefacto.
Según ha explicado el secretario de Estado de Seguridad, todos los sobres tienen características similares, son de color marrón y los primeros indicios apuntan a que su procedencia es «del propio territorio español».
Horas antes, la delegada del Gobierno en Aragón, Rosa Serrano, afirmaba en una entrevista radiofónica en la Cadena Ser que el sobre que llegó a Zaragoza «supuestamente» procedía de Ucrania.
Por su parte, la Embajada de Rusia en España ha emitido un comunicado en el que sostiene que «cualquier amenaza o acto terrorista, más aún dirigidos contra una misión diplomática, son totalmente condenables», según ha difundido en sus redes sociales.