Berlín, 24 jun (Prensa Latina) El Banco Central Europeo (BCE) informó hoy que avanzan los preparativos para el eventual establecimiento de un euro digital, con funcionalidad y altos niveles de privacidad en red y offline.
Desde el 1 de noviembre de 2023 la institución trabaja en la formulación técnica de la propuesta, eso incluye una metodología para calibrar los límites de tenencia de la futura moneda, indica el primer informe sobre el tema publicado este lunes.
Según recalca el texto, el diseño del euro digital incluye una funcionalidad offline que concedería a los usuarios un nivel de privacidad similar al del efectivo para los pagos en comercios físicos y entre particulares.
Al pagar fuera de línea, los datos personales de la transacción solo serían conocidos por el ordenante y el beneficiario y no se compartirían con los proveedores de servicios de pago, el Eurosistema o cualquier proveedor de servicios auxiliares, abunda el documento.
De acuerdo con la práctica actual, los proveedores de servicios de pago tendrían acceso únicamente a los datos personales necesarios para garantizar el cumplimiento de la legislación de la Unión Europea, como la normativa contra el blanqueo de capitales.
Para utilizar los datos con fines comerciales, los proveedores de servicios de pago necesitarían el consentimiento explícito de los usuarios, abunda el anuncio.
Al decir de la fuente, las labores técnicas del BCE han estado centradas en las consideraciones relativas a la entrega y a la forma de financiar y desfinanciar los monederos digitales en euros fuera de línea, incluida la forma de realizar comprobaciones contra el blanqueo de capitales y la falsificación.
La implantación efectiva de un euro digital fuera de línea en los dispositivos móviles dependerá en última instancia de los requisitos establecidos para los fabricantes de equipos y los proveedores de servicios de comunicaciones electrónicas en el Reglamento sobre el euro digital, aclara el reporte.
Para el caso de las transacciones online, el BCE promete condiciones técnicas que eleven la privacidad en comparación con las actuales soluciones de pago, sin olvidar la protección del usuario final frente al fraude.
A fines del próximo año, el BCE deberá decidir si el proyecto de euro digital pasará a una siguiente fase, aunque la futura emisión de la moneda para su empleo en línea y sin conexión dependerá de la adopción de las normas legales pertinentes por el bloque comunitario.