El presidente estadounidense, Donald Trump, planea aumentar sustancialmente el envío de migrantes indocumentados a la base de Guantánamo, Cuba, a partir de esta semana, en una cantidad que podría cifrarse en miles, reporta Politico.
El medio estadounidense precisa que las autoridades estarían evaluando la transferencia de al menos 9.000 personas, lo que representa un incremento exponencial con respecto a los 500 extranjeros que han sido enviados a la instalación militar desde febrero pasado y va en consonancia con la promesa de alojar hasta 30.000 inmigrantes en esas instalaciones anunciada por el Gobierno.
De acuerdo con los documentos consultados, los traslados comenzarían este mismo miércoles 11 de junio y se espera que las personas detenidas permanezcan bajo custodia en la base militar durante un lapso no especificado antes de ser deportados a sus países de origen.
Asimismo, se trataría de planes concretados en fecha reciente, por lo que estarían sujetos a modificaciones, apunta la documentación, en la que también se refiere que el Departamento de Seguridad Nacional podría abstenerse de notificar previamente a los países de las personas objeto de estas medidas.
Campo minado
En uno de los documentos se precisa que Washington contempla el envío a Guantánamo de unos 800 ciudadanos europeos, en una lista que incluye a un austríaco, 100 rumanos y 170 rusos.
Aparentemente, el plan habría causado malestar entre algunos miembros del cuerpo diplomático, quienes habrían alegado que la mayor parte de las naciones europeas son aliadas de la Casa Blanca y cooperan activamente en la repatriación de sus connacionales, por lo que el envío de deportados a la controvertida instalación, señalada de graves violaciones a los derechos humanos, podría parecer una decisión cuando menos innecesaria.
Así las cosas, funcionarios del Departamento de Estado que trabajan con Europa estarían tratando de disuadir al Departamento de Seguridad Nacional para que dé marcha atrás a este plan de deportaciones.
