En un pequeño estudio piloto, algunas mujeres jóvenes que buscaban perder peso con una dieta cetogénica baja en calorías obtuvieron un beneficio inesperado: su acné comenzó a desaparecer.
“Estos hallazgos representan una oportunidad para controlar una enfermedad de la piel que afecta a la mayoría de los adolescentes y a muchos adultos en algún momento de sus vidas, causando angustia, vergüenza, ansiedad y baja confianza en sí mismos entre los pacientes, robándoles su calidad de vida”, señaló el autor principal del estudio, Luigi Barrea, de la Università Telematica Pegaso en Nápoles, Italia.
Su equipo presentó sus hallazgos el martes en el Congreso Europeo sobre la Obesidad en Viena, Italia. Como explicó el grupo de Barrea, se cree que el acné es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta a lo que se conoce como la unidad pilosebácea: el folículo piloso, el tallo piloso y la glándula sebácea cercana. Alrededor del 9% de la población mundial se ve afectada por el acné, principalmente en la adolescencia.
Según los investigadores italianos, el acné se ha relacionado durante mucho tiempo con la obesidad, tal vez porque ambas afecciones están relacionadas con el aumento de la inflamación y el estrés oxidativo.
¿La dieta cetogénica combate la inflamación y el estrés oxidativo?
“Aunque el rol de la dieta en el acné no es concluyente, la dieta cetogénica muy baja en calorías es conocida por ayudar a perder peso y generar cuerpos cetónicos antiinflamatorios que proveen energía cuando los carbohidratos de la dieta son escasos, además de promover la resistencia contra el estrés inflamatorio y oxidativo”, explicó Barrea en un comunicado de prensa de la reunión. “Pensamos que valdría la pena explorar este tratamiento potencial para el acné”.
Su estudio fue pequeño: solo 31 mujeres jóvenes (de 18 a 30 años) que eran obesas y tenían niveles moderados de acné. Todas las mujeres se embarcaron en 45 días de una dieta cetogénica muy baja en calorías (solo 700-800 kilocalorías por día). De acuerdo con el régimen cetogénico, el 44% de las calorías provenían de las grasas, el 43% de las proteínas y solo el 13% de los carbohidratos.
Todas las mujeres completaron con éxito la dieta, y se reportaron algunos “efectos adversos” leves, como dolores de cabeza, debilidad muscular. Los resultados de la pérdida de peso fueron impresionantes. Las mujeres perdieron un promedio de alrededor de un 8 por ciento de su peso corporal a lo largo de los 45 días, con una reducción porcentual similar en las medidas de la cintura, reportó el equipo de Barrea.
Su acné también mejoró: medido por una “escala global de clasificación del acné” estándar, las puntuaciones mejoraron en un promedio del 41.5% en el transcurso de la dieta de 45 días. Además, “los participantes también reportaron una satisfacción con la vida mucho mejor, con una mejora promedio del 45 por ciento en su puntuación de calidad de vida”, reportaron los investigadores.
El equipo de Barrea dijo que había una base científica para aliviar el acné. Descubrieron que los marcadores de inflamación sistémica, estrés oxidativo y salud del microbioma intestinal mejoraron. Las mejoras en la inflamación y la oxidación parecieron correlacionarse con reducciones en la gravedad del acné, dijo el equipo.
“En este pequeño ensayo piloto, la dieta cetogénica muy baja en calorías de 45 días demostró mejoras notables en la gravedad del acné que parecían atribuirse a los conocidos efectos antioxidantes y antiinflamatorios de la dieta”, concluyó Barrea. Sin embargo, enfatizó que el estudio fue muy pequeño y que debido a que estos hallazgos se presentaron en una reunión médica, deben considerarse preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.
Sin embargo, «si se confirma en estudios más grandes y robustos, la dieta cetogénica muy baja en calorías podría proporcionar una alternativa valiosa a los antibióticos y los tratamientos tópicos para ayudar a los muchos miles de personas afectadas por el acné», dijo Barrea.
