Acuerdos internacionales que prohíben a Haití desviar el río Masacre 

Acuerdos internacionales que prohíben a Haití desviar el río Masacre

Con el anuncio de la suspensión del visado a ciudadanos haitianos y el cierre de la frontera por el gobierno dominicano medida adoptada durante una reunión del Consejo de Seguridad Nacional, encabezada por el presidente Luis Abinader, a raíz del desvío del río Masacre para la construcción de un canal en Haití, reavivan los tratados territoriales entre ambas naciones.  

En las últimas semanas la intervención al río Masacre ha acaparado la atención de las autoridades, abriendo el debate sobre los acuerdos que prohíben el desvío del cauce del río en cuestión y los límites territoriales definidos en 1929, 1935 y 1936 específicamente. 

Históricamente República Dominicana y Haití se han visto enfrentados por el dominio del territorio, la proliferación de sus creencias, idioma y cultura en general desde su nacimiento tras la división de la isla. 

Si bien es cierto, los acuerdos territoriales se remontan al Tratado de Ryswick en 1697 donde Francia obtuvo de España la parte occidental de la isla de Santo Domingo, que se convirtió en Haití, seguido del Tratado de Aranjuez el 3 de junio de 1777, el cual daba el reconocimiento jurídico de la ocupación gradual de la parte Este de la isla de Santo Domingo por los franceses. 

Ratificada años más tarde la noche del 27 de febrero de 1844, cuando los dominicanos marcaron un precedente con la proclamación de la independencia nacional, seguido de los esfuerzos por erradicar la injerencia extranjera en suelo criollo a lo largo de su historia.

El 21 de enero de 1929, ambas naciones suscribieron un Tratado de Fronteras, también conocido como “Paz y Amistad Perpetua y Arbitraje de 1929”, en virtud del cual fijaron los límites fronterizos con la participación del entonces presidente Horacio Vásquez y Louis Bornó. En este tratado se fijaron los límites y se dio  un paso histórico ante los problemas de estabilidad entre ambas naciones.

Acuerdo que el pasado 4 de septiembre del presente año, fue desconocido por el excanciller haitiano, Claude Joseph, quien  dijo que en ningún caso, Haití debería estar obligado a suspender un proyecto por la decisión de otra nación, a propósito de que la Cancillería dominicana solicitara detener de inmediato el reinicio de la construcción del canal. 

Otro convenio firmado tuvo lugar en 1935 y se denominó Acuerdo Fronterizo, mediante este se buscaba la paz definitiva entre dominicanos y haitianos dejando atrás las dificultades que habían impedido la ejecución del trazado de la línea fronteriza contenida en el tratado previamente estipulado el 21 de enero de 1929. 

A este se suma el Protocolo de Revisión de Frontera de 1936 establecido durante los gobiernos de Rafael Leonidas Trujillo y Stenio Vincent, en la capital haitiana tras varios años de conversaciones, dichos acuerdos dieron paso a los límites territoriales y fronterizos vigentes en la actualidad. 

De su lado el coordinador residente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en República Dominicana, Mauricio Ramírez Villegas, dijo que las medidas adoptadas por el Gobierno del presidente Luis Abinader sobre Haití tras la intención de desviar el río Masacre, son legítimas.

El presidente Luis Abinader ha sido enfático en la lucha por la soberanía, así como su posición ante la comunidad internacional al asegurar que todos los países pueden cansarse de los problemas haitianos, pero la República Dominicana no puede hacerlo.

En respuesta al conflicto surgido en consecuencia a la excavación de un canal en la parte haitiana en perjuicio del ecosistema dominicano en esa zona de la frontera, el gobierno decidió suspender la emisión de visados a ciudadanos haitianos hasta nuevo aviso, mantener el cierre total de la frontera por Dajabón, reactivar la toma de la Aduana en el río Dajabón y la construcción del proyecto de la presa Don Miguel.