Según los documentos, Spears retendrá una variedad de joyas y otros objetos personales, además de conservar las ganancias que haya obtenido antes, durante y después de su matrimonio con Asghari. Además, se especifica que hay otros activos adicionales que se dividirán según lo establecido en su acuerdo prenupcial.
Los documentos presentados en un tribunal de Los Ángeles el miércoles por la noche están pendientes de la firma de un juez para oficializarse. Según una fuente exclusiva de Page Six, Britney está avanzando y desmintiendo rotundamente las historias sobre su bancarrota, considerándolas ridículas y falsas.
A pesar de disfrutar de lujosos viajes gracias a su recién ganada libertad, la fuente revela que Britney tiene un contrato histórico para un libro que la beneficiará a largo plazo, además de tener un gran potencial económico, incluyendo los derechos cinematográficos de «Mujer en Mí». El divorcio, según se nos informa, se resolvió de manera amistosa en gran medida gracias a un acuerdo prenupcial sólido.
Los representantes de Spears y Asghari no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios de Page Six. En agosto pasado, fuentes confirmaron que la superestrella del pop, de 42 años, y el entrenador convertido en actor, de 30, se habían separado después de 14 meses de matrimonio en medio de acusaciones de infidelidad por parte de Spears.
Además, una fuente exclusiva de Page Six reveló en ese momento que Asghari había intentado renegociar los términos del sólido acuerdo prenupcial de la pareja, aunque finalmente no lo impugnó. Asghari oficialmente solicitó el divorcio de Spears el 16 de agosto, citando «diferencias irreconciliables». Indicó que la fecha de su separación era el 28 de julio y solicitó que la Princesa del Pop le pagara manutención conyugal y los honorarios de sus abogados.
Page Six informó exclusivamente en ese momento que Spears reunió a un poderoso equipo legal al poner a la famosa abogada de derecho de familia Laura Wasser a cargo de su caso, además del exfiscal federal Mathew Rosengart, quien la ayudó a liberarse de su tutela de 13 años. Por su parte, Asghari contrató al abogado de divorcios con sede en California, Neal Hersh, quien dijo en documentos judiciales de la presentación inicial que su cliente «aún tenía que determinar la naturaleza completa y el alcance de los bienes y obligaciones separados de cada parte».
