Bukele abandonará Presidencia a más tardar 30 noviembre

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, debe abandonar la jefatura del Estado a más tardar el 30 de noviembre para participar en las elecciones del 4 de febrero, indican fuentes legislativas.
Bukele abandonará Presidencia a más tardar 30 noviembre

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, debe abandonar la jefatura del Estado a más tardar el 30 de noviembre para participar en las elecciones del 4 de febrero, indican fuentes legislativas.

El mandatario debe pedir licencia para apartarse del gobierno, un procedimiento que estableció una interpretación de la Sala de lo Constitucional en una resolución emitida el 3 de septiembre de 2021, que le exigiría al presidente no gobernar durante los últimos seis meses de su periodo presidencial 2019-2024 para poder reelegirse.

Aun no se sabe cuándo el gobernante dará ese pasó que lo alejara del poder,  momentáneamente si como sostienen las encuestas vence en los próximos comicios.

La víspera, la diputada del partido Nuevas Ideas y vicepresidenta de la Asamblea Legislativa, Suecy Callejas, aseguró que están a la espera de que pida licencia de su cargo para enfocarse a su campaña proselitista.

DOS FECHAS DE SESIONES ORDINARIAS

Hasta el 30 de noviembre el Legislativo tiene dos fechas de sesiones ordinarias, y de no presentarse en esas ocasiones, estaría obligado a una sesión extraordinaria para liberarlo y decidir quién será el designado o designada presidencial.

Estamos a la espera de ese momento. Obviamente va a ser un momento importante y será una terna para presidente y una para vicepresidente, porque tanto el presidente actual como el vicepresidente actual ya están inscritos sin voto en contra, dijo Callejas.

Según la presidenta del Tribunal Supremo Electoral, Dora Martínez de Barahona, y el también magistrado Rubén Meléndez,  el mandatario debe pedir un permiso o licencia durante los últimos seis meses de su gobierno.

Opinó Martínez que la liberación del cargo obedece a garantizar la competencia electoral equitativa y evitar que Bukele use recursos públicos para propaganda de campaña, algo de lo que lo acusan sectores opositores.