Cuáles son las cinco claves del método Montessori para una crianza respetuosa

Cuáles son las cinco claves del método Montessori para una crianza respetuosa

El método pedagógico Montessori tuvo gran relevancia en los últimos años, sobre todo asociado a la crianza respetuosa y consciente. Se trata de una filosofía educativa desarrollada por la pedagoga italiana Maria Montessori, a principios del siglo XX, centrada en promover una educación que respeta el desarrollo natural y la experimentación de los niños.

Ofrece alternativas no tradicionales para educar a nuestros hijos y cada vez tiene más adeptos en el mundo. ¿Por qué? Porque el niño y su desarrollo integral son los protagonistas. La independencia, el respeto, la observación y el aprendizaje a su propio ritmo y un ambiente preparado son algunos de los pilares fundamentales.

Según esta pedagogía, la mente de los niños son como esponjas, que absorben información de su entorno. Se aprende haciendo, lo que alienta la espontaneidad y la concentración. A su vez, es importante el control de los errores, los periodos sensitivos y la experimentación sensorial.

Y si hay un rol clave es el de los padres, no como líderes, sino como guías, para observar más y dirigir menos. La Dra. Lisa Feldman Barrett, neurocientífica de la Universidad de Harvard, supo decir a ABC que “el cerebro de un niño no es el de un adulto en miniatura. Es un cerebro que nace en construcción y que se conecta al mundo. Y depende de los padres crear un mundo -tanto físico como social- rico en instrucciones de conexión”.

“Nunca ayudes a un niño mientras está realizando una tarea en la que siente que puede tener éxito”, es una de las frases célebres de Maria Montessori. Y abre la puerta para pensar cómo incorporar su experiencia a la crianza.

La relación de la pedagogía Montessori y la crianza

La pedagogía Montessori tiene una estrecha relación con la crianza, que se extiende más allá del ambiente educativo formal. Existen algunos principios que pueden ser aplicados en el hogar para fomentar el desarrollo independiente, el respeto y la comprensión del niño.

Aunque en su origen se desarrolló como un método educativo, la pedagogía Montessori es también aplicable a distintos aspectos de la crianza cotidiana. Se trata, entonces, de una visión holística del aprendizaje de los niños y la creación de un ambiente familiar basado en el respeto mutuo.

La integración de estos principios en la vida diaria puede contribuir a criar niños independientes, creativos, confiados y respetuosos. En un estudio reciente, los investigadores llegaron a la conclusión de que la educación Montessori tiene un impacto significativo y positivo en los resultados de los chicos, tanto académicos como no académicos.

Cinco claves de la pedagogía Montessori para incorporar a la crianza

1. Fomentar la independencia

Montessori enfatiza la importancia de permitir que los niños hagan cosas por sí mismos desde una edad temprana, lo que se traduce en la crianza como darles oportunidades en el hogar para que participen en tareas adecuadas para su edad, como vestirse, preparar snacks simples y ayudar en las tareas domésticas.

2. Crea un ambiente preparado

Adaptar el entorno del hogar para que sea seguro, accesible y estimulante para los niños. Esto significa organizar las habitaciones, especialmente las áreas de juego, de manera que los muebles y materiales estén a la altura de los niños, permitiéndoles explorar y utilizarlos de forma independiente, según la edad que tengan. De acuerdo al IMI, se trata del “entorno en el que el niño se desarrolla, tanto el espacio físico como las personas con las que el niño se relaciona, las actividades y directrices que se plantean en ese espacio”.

3. Respeto por el niño y su propia evolución

La crianza Montessori implica escuchar activamente a los niños, observar sus intereses y necesidades sin imponer o interrumpir innecesariamente. Esto promueve una relación de respeto mutuo y comprensión. “Cada niño tiene un ritmo diferente y el adulto debe respetarlo, evitando intervenir o hacer las cosas en lugar del niño, pues esto obstaculiza el aprendizaje y provoca en él un sentimiento de inferioridad y frustración”, afirman desde el IMI.

4. Aprendizaje autodirigido basado en el interés

En la pedagogía Montessori, el aprendizaje se guía por los intereses del niño. Los padres pueden aplicar este principio al observar y proporcionar recursos o actividades que se alineen con los intereses y pasiones actuales del niño.

Se les da la libertad de elegir sus propias actividades y trabajar en ellas a su propio ritmo. Este enfoque ayuda a cultivar una actitud positiva hacia el aprendizaje, al fomentar la curiosidad natural y la motivación intrínseca.

5. Conexión con la Naturaleza

Maria Montessori enfatizó la importancia de la naturaleza en el desarrollo del niño. La crianza Montessori busca crear oportunidades para que los chicos interactúen con el entorno natural, aprendan de él y desarrollen un respeto profundo por el mundo vivo.

Esto puede incluir actividades al aire libre, el cuidado de plantas y animales, el cuidado de huertas y la exploración de entornos naturales.