Gestión de la ONU en Haití: Entre la controversia y la crítica

Gestión de la ONU en Haití: Entre la controversia y la crítica

La intervención de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Haití, a través de su misión de estabilización (MINUSTAH), ha sido objeto de múltiples análisis y críticas.

Durante los 13 años que duró esta operación, se invirtieron miles de millones de dólares sin lograr una solución concreta a los problemas estructurales que aquejan al país caribeño. Rafael Núñez, periodista y escritor dominicano, ha sido uno de los voceros de esta crítica, señalando no solo la ineficacia de la misión sino también la gestión dudosa de los recursos, algunos de los cuales, según denuncias, terminaron en cuentas bancarias de socios cercanos a importantes figuras de la misión.

Impacto limitado y denuncias de corrupción

A lo largo de su presencia en Haití, la ONU y sus cascos azules consumieron una cantidad significativa de recursos financieros, sin que esto se tradujera en avances sustanciales hacia la estabilización del país. Núñez resalta cómo, a pesar de la magnitud de la inversión, la misión no dejó «un solo problema resuelto, ni siquiera encaminado».

Además, apunta a denuncias preocupantes sobre el desvío de fondos hacia las cuentas bancarias de individuos ligados a la misión, poniendo en tela de juicio la integridad y la transparencia de la operación.

Críticas a la doble moral de la ONU

La situación actual en Haití, marcada por una crisis profunda y multifacética, ha llevado a la ONU a expresar su «preocupación» por los haitianos repatriados desde la República Dominicana. Sin embargo, El periodista Rafael Núñez cuestiona esta postura, argumentando que dicha «preocupación» contrasta notablemente con la aparente indiferencia de la organización ante los millones de haitianos que viven aterrorizados, asesinados, secuestrados y violados por bandas criminales.

Este contraste evidencia, según el periodista, una doble moral por parte de la ONU, la cual ha fallado en mostrar la misma angustia por las víctimas de la violencia y la inestabilidad en Haití.

Llamado al respeto de la soberanía dominicana

Rafael Núñez subraya la necesidad de que la ONU respete al pueblo y al gobierno dominicano en su derecho soberano de proteger lo que han construido con determinación y sacrificio.

Critica especialmente la falta de atención y reparación hacia las mujeres haitianas que fueron explotadas y embarazadas por miembros de la MINUSTAH, calificando esta omisión como un claro ejemplo de doble moral.

Este llamado refleja la urgencia de una revisión crítica y profunda de las políticas y prácticas de las misiones de paz y estabilización de la ONU, en busca de un compromiso real con los derechos humanos y la dignidad de todos los afectados.