El Sistema 9-1-1 brinda sus servicios a más de 9 millones de dominicanos y residentes en 25 provincias, donde tiene instaladas más de 5,000 cámaras
Por: Maria Alejandra Lazala
Para la República Dominicana, el Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad (9-1-1), que entró en vigencia el 31 de mayo del 2014, llegó para aportar tranquilidad y seguridad a la población ante los sucesos que requieren atención y tratamiento de inmediato.
Los esfuerzos iniciales se concentraron en conocer los sistemas de emergencias de otros países para adaptar esos modelos a la realidad de la nación, enfocado principalmente en tener una excelente cobertura en telecomunicación y radiocomunicación, utilizando recursos económicos, capital humano capacitado y las intervenciones de instituciones que formarían parte de este importante y necesario sistema de atención a emergencias.
Para Francisco Carreño, coordinador de Relaciones Institucionales, de la referida entidad, el 9-1-1, ha sido el esfuerzo de nueve años ininterrumpidos que ha logrado crecer y expandir sus servicios a casi el 92.3% del territorio nacional, esto a través de seres humanos que detrás de la línea telefónica fungen como el primer eslabón en la cadena de asistencia a las emergencias que salvan vidas.
La labor de los operadores en el Sistema 9-1-1 es imprescindible durante los 365 días del año para mantener el nivel constante de servicio al ciudadano, que ya está disponible en la Zona Sur, en las provincias: San Juan de la Maguana, Barahona, Azua, San José de Ocoa, San Cristóbal y Peravia.
Así como, en la Zona Este, en las provincias: Hato Mayor, El Seibo, La Altagracia, La Romana, San Pedro de Macorís y Monte Plata, en la Zona Norte, en Jarabacoa de la provincia La Vega, la ciudad de Santiago de los Caballeros y en los municipios donde el 9-1-1 tenga cobertura.
En ese sentido el presidente Luis Abinader ha supervisado los trabajos que se realizan desde la sede principal del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 9-1-1, como parte del seguimiento para fortalecer la atención primaria, los procesos de consolidación y mejora en respuesta a las emergencias y los proyectos de expansión en la cobertura de los servicios en las provincias fronterizas.
El Sistema 9-1-1 brinda sus servicios a más de 9 millones de dominicanos y residentes en 25 provincias, donde tiene instaladas más de 4,800 cámaras.
Suministro de datos es la clave
El director ejecutivo del Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 9-1-1, coronel piloto, Randolfo Rijo Gómez, destacó que la información suministrada es fundamental para garantizar una respuesta eficiente ante emergencias.
La información es clave, son dos datos importantes para despachar las unidades de respuesta: cuál es la emergencia y donde está ocurriendo. Dependiendo de la magnitud del evento, los operadores podrán realizar preguntas adicionales para dimensionar adecuadamente la asistencia.
Además, indicó que el acceso a la información sobre las emergencias más frecuentes, como los accidentes de tránsito y la violencia doméstica, es esencial para implementar medidas preventivas y de respuesta adecuadas en nuestras comunidades.
Según datos ofrecidos por la institución, desde su entrada en vigencia en el 2014 hasta el 2021, recibieron más de 30 millones de llamadas, coordinando la atención a las emergencias en procura de salvaguardar las vidas y bienes de los ciudadanos.
Emergencias atendidas
La entidad reportó que, desde enero hasta diciembre de 2022, gestionó 666,430 emergencias y 42,220 asistencias viales desde las 25 provincias donde opera.
Las agencias que conforman el Sistema 9-1-1, lograron respuesta coordinada generando a través de la Policía Nacional una asignación del 95.7 % de los casos; el SNS atendió el 74.2 %; la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT) un 11.1 %; los Cuerpos de Bomberos el 3.9 %; y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) participó en el 0.9 % de las emergencias.
En términos de gestión de emergencias, Tammy Ramírez, encargada de Gestión de Emergencias de la entidad, informó que el 9-1-1 maneja aproximadamente de 1,100 a 1,200 emergencias diarias en Santo Domingo, y de 700 a 900 en Santiago, lo que representa un total de alrededor de 2000 emergencias atendidas diariamente.
También informó, que generalmente las emergencias frecuentes son en primer lugar por accidentes de tránsito, luego por violencia doméstica y agresión, que esta marca la diferencia entre si son familiares o no. Todas las emergencias son tipificadas de acuerdo a lo que reporta el usuario.
Siendo los accidentes de tránsito y la violencia doméstica el principal motivo de atención con más de un 20.3 % de los casos, seguidos por dificultad respiratoria, emergencias obstétricas y personas inconscientes.
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En ese sentido y para continuar en beneficio de la ciudadanía a finales del 2022, la presidencia de la República puso a disposición de la Dirección de Servicios de Atención a Emergencias Extrahospitalarias del Servicio Nacional de Salud (SNS), 58 vehículos para la eficiencia de sus operaciones
Esta nueva flotilla vehicular contó con 40 furgonetas para el soporte de las operaciones logísticas de los Centros Reguladores de Urgencias y Emergencias (CRUE) provinciales; 13 ambulancias y 5 camiones.
Emergencias atendidas en marzo 2023
A través del boletín mensual de transparencia del Sistema Nacional de Emergencias, Reseñas pudo constatar, que en el mes de marzo del 2023 se recibieron 410,463 llamadas, ocupando el primer lugar los accidentes de tránsito con un 11.6%.
Las llamadas por violencia doméstica ocuparon el 7.8 %, incendios un 7.5%, dificultad respiratoria un 6.3% y emergencias obstétricas para un 6.0%.
“La finalidad de la entidad es sensibilizar a la población sobre la incidencia del Sistema 9-1-1 en la protección de la vida y bienes de los residentes en República Dominicana”, indicó Francisco Carreño.
Desde su creación, el Sistema Nacional de Emergencias ha sido valorado como uno de los mayores logros en materia de seguridad ciudadana, sirviendo como un hilo conductor entre más de 20 instituciones de respuesta que son coordinadas por la institución desde los centros públicos de llamadas de emergencias.
