Al menos doce cadáveres con signos de violencia fueron hallados este lunes en la zona de Pétion-Ville, Puerto Príncipe, sin que se conozca el motivo o la identidad de las víctimas hasta el momento.
Los cuerpos dispersos en plena vía, en los alrededores de una zona dedicada al comercio informal de alimentos y otros productos, fueron reportados a tempranas horas por residentes de las zonas donde fueron encontrados.
Quienes también aseguran que las muertes pudieran estar relacionadas a un tiroteo mientras otros aseguran que se trata de bandidos abatidos por la Policía Nacional haitiana.
Desde el amanecer, hombres armados han sembrado el terror en Laboule y Thomassin, dos barrios de Pétion-Ville, donde han atacado un banco, una gasolinera, y varias residencias privadas, según reportes de la agencia de noticias AFP.
Como es el caso de la residencia del consejero del Tribunal de Cuentas, Pierre Volmar Demesyeux, quien se encuentra a salvo gracias a la intervención de la seguridad de su casa.
Bandas armadas atacaron una central eléctrica y cuatro subestaciones, donde este lunes siguen las tensiones generadas por el terror que imponen estos grupos armados.
Dichas instalaciones están ubicada en el área metropolitana de Puerto Príncipe, todas quedaron parcialmente destruidas y sin poder ofrecer sus servicios.
Los bandidos se llevaron documentos importantes, instalaciones eléctricas, cables, inversores, baterías, así como equipos informáticos y de oficina.
La dirección general del sector energético hizo un llamado a las autoridades competentes para asegurar sus múltiples sedes en todo el país, informó el diario digital Haití Libre.
Así como fue reportado un saqueo a uno de los contenedores del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
En un balance preliminar, de los 17 contenedores uno fue vaciado, el mismo contenía artículos para garantizar la supervivencia materna, neonatal e infantil, incluidos resucitadores y equipos relacionados.
Haití atraviesa una crisis política, social y económica que empeoró con el magnicidio de Jovenel Moises y que hoy se encuentra sumergida en el proceso de transición política tras la renuncia del primer ministro Ariel Henry el pasado lunes.
