Naciones Unidas, 8 mar (EFE).- La ONU negó este martes haber pedido a sus funcionarios que eviten usar los términos «guerra» o «invasión» para referirse al conflicto en Ucrania, después de que esa recomendación apareciese en un correo electrónico de la organización filtrado a algunos medios.
El mensaje, publicado por el diario irlandés «The Irish Times», recoge toda una serie de recomendaciones supuestamente dirigidas al personal de Naciones Unidas, incluida esa petición para evitar ciertos términos con el fin de mantener una impresión de imparcialidad.
Según la ONU, el mensaje habría salido de una oficina regional y, aunque es auténtico, no refleja en absoluto la postura oficial de la organización.
«Sencillamente no es cierto que se haya aleccionado al personal para que no usen palabras como ‘guerra’ e ‘invasión’ para describir la situación en Ucrania», dijo a Efe el portavoz de la organización Stéphane Dujarric.
El portavoz recordó que en los últimos días altos cargos de Naciones Unidas han utilizado esas palabras en público y puso como ejemplo obvio un tuit publicado este mismo lunes por la jefa de Asuntos Políticos, Rosemary DiCarlo.
«Después de casi dos semanas, es dolorosamente claro que quienes más están sufriendo después de la invasión rusa de Ucrania son los civiles -asesinados, heridos, desplazados. Esta guerra no tiene sentido. Estamos listos para apoyar todos los esfuerzos de buena fe para negociar el fin de la matanza», señaló DiCarlo en ese tuit.
En su conferencia de prensa diaria, Dujarric señaló que parece que el correo filtrado salió de una oficina regional e insistió en que desde la sede central no ha salido ningún tipo de instrucción como esa.
«Yo no dudo de la veracidad del e-mail, pero parece que alguien en una oficina regional habría decidido enviar este correo como instrucciones. Es algo que no se debería haber hecho», dijo.
En ese sentido, recalcó que cuando los más altos cargos de Naciones Unidas han usado los términos «guerra» e «invasión» para hablar de Ucrania, está claro que otros en la organización también pueden utilizarlos.
Según apuntó, lo que sí se ha remitido a la plantilla es un recordatorio sobre su estatus como funcionarios internacionales y la importancia de que cumplan con sus responsabilidades y se expresen en línea con las posturas que defiende la organización.
Ese llamamiento, recalcó, no se limita a la crisis en Ucrania y es algo que la ONU recuerda regularmente a sus empleados.
Desde el inicio de la invasión rusa, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha hablado con claridad en contra de las acciones de Moscú, que ha calificado de violación de la ley internacional y una «guerra que no tiene sentido».
El Gobierno ruso, mientras, insisten en referirse a su intervención únicamente como «operación militar especial».
Tras la publicación del correo filtrado, el ministro ucraniano de Exteriores, Dmytro Kuleba, consideró «difícil de creer que la ONU pueda básicamente imponer el mismo tipo de censura que el Kremlin impone dentro de Rusia» y apremió a la organización a desmentir la información si es falsa.