La vitamina D podría ser una barrera de defensa contra el cáncer

La vitamina D podría ser una barrera de defensa contra el cáncer

La vitamina D es un nutriente que el cuerpo humano necesita para fortalecer los huesos y mantenerlos saludables.Tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y neuroprotectoras que contribuyen con el buen estado del sistema inmune, la función muscular y la actividad de las células cerebrales.

Ahora, un equipo de investigadores del Reino Unido, los Estados Unidos y Dinamarca han encontrado, a través de un estudio en ratones, que la vitamina D podría favorecer el crecimiento de un tipo de bacteria intestinal que mejora la inmunidad contra el cáncer. Reportaron el hallazgo en la revista Science, editada por la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia.

Los científicos pertenecen al Instituto Francis Crick, del Reino Unido, al Instituto Nacional del Cáncer de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH) de los Estados Unidos, y a la Universidad de Aalborg, en Dinamarca.

A través de la experimentación, se encontró que los ratones que recibían una dieta rica en vitamina D presentaban una mayor resistencia inmunitaria a los cánceres trasplantados experimentalmente y una mejor respuesta al tratamiento inmunoterápico.

Ese efecto positivo también se observó cuando se utilizó la edición genética para eliminar una proteína que se une a la vitamina D en la sangre y la mantiene alejada de los tejidos.

Cuáles fueron los aportes del nuevo estudio

El equipo descubrió que la vitamina D actúa sobre las células epiteliales del intestino, que a su vez aumentan la cantidad de una bacteria llamada Bacteroides fragilis.

Ese microbio dio a los ratones una mayor inmunidad contra el cáncer, ya que los tumores trasplantados no crecieron tanto, pero los investigadores aún no están seguros sobre cómo ocurrió.

Para comprobar si las bacterias por sí solas podían proporcionar una mejor inmunidad contra el cáncer, se administró Bacteroides fragilis a ratones con una dieta normal. Estos ratones también resistieron mejor el crecimiento tumoral, pero no cuando se les administró una dieta deficiente en vitamina D.

Estudios anteriores ya habían propuesto una relación entre la carencia de vitamina D y el riesgo de cáncer en humanos, aunque las pruebas no habían sido concluyentes. En cambio, la nueva investigación aportó una evidencia con más peso.

Los investigadores analizaron un conjunto de datos de 1,5 millones de personas en Dinamarca, que puso de relieve una relación entre niveles más bajos de vitamina D y un mayor riesgo de cáncer.

Un análisis separado de una población de pacientes con cáncer también sugirió que las personas con niveles más altos de vitamina D tenían más probabilidades de responder bien a los tratamientos inmunológicos contra el cáncer.

Aunque la bacteria Bacteroides fragilis también se encuentra en el microbioma humano, se necesita más investigación para comprender si la vitamina D ayuda a favorecer cierta resistencia inmunológica al cáncer a través del mismo mecanismo.

Caetano Reis e Sousa, jefe del Laboratorio de Inmunobiología del Crick y autor principal, reconoció: “Lo que hemos demostrado aquí nos ha sorprendido: la vitamina D puede regular el microbioma intestinal para favorecer un tipo de bacteria que proporciona a los ratones una mejor inmunidad contra el cáncer”.