Ni izar banderas, ni toques de corneta: Lula extingue las escuelas cívico-militares de Bolsonaro

Ni izar banderas, ni toques de corneta: Lula extingue las escuelas cívico-militares de Bolsonaro

Adiós a los uniformes militares, al toque de corneta, a formar fila al entrar en clase o a izar la bandera nacional de Brasil. El Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva ha dado carpetazo a uno de los proyectos estrella de su antecesor Jair Bolsonaro: las escuelas cívico-militares. 

Bolsonaro, un excapitán del Ejército y un abierto nostálgico de la dictadura militar (1964-1985), implementó este tipo de colegios públicos para hacer frente a la «falta de disciplina» y al «fuerte adoctrinamiento ideológico» de la izquierda.

El Programa Nacional de Escuelas Cívico-Militares (Pecim) –ejecutado entre el Ministerio de Educación y de Defensa– nació en 2019 también con el supuesto objetivo de disminuir la deserción escolar e inhibir los casos de violencia a partir de la disciplina militar.

Se estableció un modelo compartido, en el que los educadores civiles se hacen cargo de la parte pedagógica, mientras que la gestión administrativa, el comportamiento y la disciplina de los alumnos la dirigen los militares.