El vicepresidente keniano, Rigathi Gachagua, confirmó hoy que el número de muertes por el desbordamiento de un río en el sur del país, que arrasó numerosas viviendas aledañas, ascendió a 71.
Las primeras informaciones recibidas la víspera atribuyeron las inundaciones a la ruptura de la presa Dark Tunnel Valley, situada en las colinas de Kijabe, pero posteriormente autoridades del Ministerio de Agua, Irrigación y Saneamiento atribuyeron el desastre al bloqueo de un túnel, que canaliza las aguas del río Tongi.
El túnel fue obstruido por árboles y escombros producto de las corrientes creadas por las intensas lluvias.
Asimismo, se informó que hay personas que aún permanecen desaparecidas, por lo que la cifra de fallecidos puede aumentar.
El epicentro de la tragedia ocurrió en la localidad de Kamuchiri, cerca de la ciudad de Mai Mahiu, donde ya más de 100 personas pudieron ser rescatadas.
El Gobierno cifró hoy en 169 el número total de muertos en el país a causa de las inundaciones durante el último mes, pero este número puede aumentar considerablemente con la tragedia ocurrida la víspera.
Asimismo, se dijo que un total de 91 personas están desaparecidas actualmente y alrededor de 190 mil 942 se consideran damnificados por las inundaciones.
Por otra parte, el ministro de Educación, Ezekiel Machogu, anunció una prórroga para la apertura de los colegios, programada en un principio para este lunes, pero que ahora tendrá que esperar hasta el 6 de mayo para retomar las clases, para evitar mayores riesgos y pérdidas de vidas.
Aunque todo el país de una forma u otra sufre los embates de los aguaceros, las regiones más dañadas son el centro y el oeste, incluida esta capital donde las inundaciones barren las casas más endebles en villas miseria instaladas en distritos pobres.
El fenómeno meteorológico conocido como «El Niño» también afectó ya con sus lluvias torrenciales otros países de África oriental, incluidos Tanzania, Burundi y la República Democrática del Congo.
