La mujer fue reclutada por un grupo armado en 1999 y desde ese entonces no se supo más de ella.
Una mujer que fue reclutada por un grupo armado hace 23 años y dada por muerta por sus familiares, pudo reencontrarse con su padre e hija, como parte de los mecanismos de reparación del Acuerdo de paz.
‘Laura’, nombre ficticio para resguardar su seguridad, iba de camino a una tienda de víveres cercana a su casa cuando fue obligada a subir al camión de un grupo armado en el municipio de Mesetas, departamento del Meta, junto a otros 30 jóvenes. Corría en año 1999.
Tras la desaparición de la joven, que para ese momento era estudiante y tenía una hija de tres años, su familia fue víctima de desplazamiento forzado y se vio obligada a trasladarse a Villavicencio, la capital del mencionado departamento.
Como trataron de contactar a los actores armados para obtener información de ‘Laura’, los amenazaron de reclutar a las hermanas menores si seguían buscando información, por lo que tuvieron que guardar silencio, según una nota publicada en la página web de la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD).
En 2001, ‘César’, el progenitor de ‘Laura’, volvió a Mesetas para seguir buscándola, pero algunos vecinos le dijeron que había fallecido en la toma al municipio de Puerto Rico en ese departamento, el 10 de julio de 1999. A pesar de esa posibilidad, no cesó su búsqueda.
Al abandonar el grupo guerrillero, ‘Laura’ fue al municipio donde vivía cuando ocurrió el rapto y los vecinos le dijeron que su familia se encontraba en la capital del Meta. Estuvo varios días recorriendo la zona sin obtener resultados satisfactorios.
Por su parte, ‘César’, en diciembre del año pasado, contactó a la UBPD de Villavicencio e hizo una solicitud formal de búsqueda.
La persona que hallaron era la que buscaban ‘Cesar’ y ‘Marcela’, su hija. La madre de ‘Laura’ falleció en 2006 por afectaciones físicas y emocionales tras la desaparición y el desplazamiento forzado.
«Para mí, recuperar a mi hija es como si me hubiera ganado una lotería, en realidad es una lotería porque encontrar a una familia que esté perdida, en tantos años, desaparecida, sin tener ninguna noticia de ella y encontrarla así como la encontré en el día de hoy, en este sitio, para mí fue una cosa muy satisfactoria», dijo César, una vez que pudo reencontrarse con su hija.
