El español y número seis del mundo superó el calor del país oceánico y se impuso 6-3, 6-4, 4-6, 3-6 y 6-3 a su rival canadiense
Este martes 25 de enero, el español Rafael Nadal (6 del mundo) evitó, a pesar de sus problemas físicos, la remontada del canadiense Denis Shapovalov (14), al imponerse por 6-3, 6-4, 4-6, 3-6 y 6-3, para estar en las semifinales del Abierto de Australia.
«No me estaba encontrando bien con mi estómago, me tomaron la tensión y comprobaron que estaba bien. Me dieron una pastilla para mejorar, eso es todo», aclaró después de acusar el intenso calor que presentó Melbourne Park, que superó los 30 grados en algunos tramos del choque.
«No sé cómo lo he hecho, estaba destrozado. Ha sido muy duro y hacía mucho calor. Fui afortunado al principio del quinto», agregó Nadal frente al público de la Rod Laver Arena.
Su plan arrancó a la perfección, utilizando las beneficiosas condiciones de jugar de día con un calor seco, y cambió tanto alturas como direcciones inteligentemente, cargando particularmente con un gran peso de bola el revés a una mano de un Shapovalov molesto con el tiempo que Nadal se tomaba entre punto y punto.
«Son todos unos corruptos», criticó el canadiense nacido en Tel Aviv al juez de silla Carlos Bernardes, que le respondió que se concentrara únicamente en el juego.